El SENTIR DE SARA .CAMARERA

Desde que escribo el blog ,he encontrado miles de historias y he conocido muchos compañeros de profesión y de entre estas historias la de SARA es de las que te cautivan ,es una camarera que sabe transmitir y que quiere abrir su corazón ,así me regaló su historia y aquí voy a compartir este regalo contigo que tanto te gustan las historias de camareros.
SARA:
Me levanto con los ojos llenos de legañas,y bufff a unas horas tan tempranas ,que mi estómago ,la verdad no se encuentra ni para almacenar un poquito de café ,así que ni lo intento...Me visto ,sacó fuerzas pop para salir y enfilo la calle que me lleva cada día a mi segunda casa.
Todo está desierto,alguna que otra persona se cruza en mi camino...pero los ojos entrecerrados ,no me dejan enfocar sus caras.
Llegó a una persiana de acero,sacó de mi bolsillo una llave,la llave que me abre la puerta a mi  paraíso... A su paraíso
Entro,y dejo la persiana medio bajada,aún no es la hora
Mis ojos ya están totalmente abiertos y despejados y sacó del congelador los croisants,napolitanas y donuts..caliento el horno,enciendo el lavavajillas y dejó correr el agua de la cafetera,revisó los fuegos y comienzo a pelar las patatas y a cortar rebanadas del pan que me acaba de traer la panadera ,para hacer las tostadas ,hace escasos minutos.
Mientras las patatas se hacen,y los bollos están en el horno,preparó las mermeladas y los cubiertos,...miro la cafetera y pienso ...si ,ahora te toca a ti.y me preparo mi primer café del día... Sin bollito,sólo café, todavía no me entra nada en el estómago...
Una hora más tarde tengo tres tortillas hechas,las vitrinas están llenas de deliciosa bollería recién hecha y los platitos ,cubiertos y servicios de café preparados,la plancha esta también encendida y todo a punto,doy un último sorbo a mi café y sonrió mirando la persiana ..no me da tiempo a ir a subirla y ya está aquí, el chico de los periódicos ,siempre me tomo la segunda ración de cafeína con el aunque casi los solape,tengo que compartir unos minutos con la persona que se levanta aún una hora antes que yo...minutos fugaces una sonrisa,la firma de la entrega y hasta mañana corazón.
Ahora si,voy a levantar la persiana con una sonrisa en la cara...las mismas personas de todas las mañanas vienen hacia mi..-eyyy SARA,buenos días!! Que tomamos hoy?.
Sirvo desayunos,bromeó ,limpio y colocó todo en su lugar....ayyyy que han volado seis horas y llega mi compañero,es la señal de que empiezan los aperitivos
Empezamos con más cafés ,(es el mejor de la ciudad)chupitos, seguimos con el motor rosli y Farías en la terraza.La gente me mira con conmiseración y me pregunta si estoy cansada,ufff no ,no,sólo tengo un poco de hambre ..se sorprenden y me insisten en que coma algo pero yo espero hasta las cinco como hago siempre...
Suelo comer un bocadillo rápidamente ,a menudo de pie o cuando tenemos mucha hambre ,mi compañero y yo nos hacemos algo de cocina...
A las seis menos cuarto llegan las mamás con los niños,y de vuelta a los cafés ,ahora con zumos batidos ,y una algarabía de críos corriendo a nuestro alrededor..nosotros siempre sonreimos ,hay otros camareros que se molestan pero a nosotros nos encantan los nenes,estos son muy buenos...
A las siete es la hora de pinchos ,cañas y vinos...algún borrachín se pone pesado y se oyen las voces de los señores que juegan a las cartas,son bastante elevadas ,me hace gracia esa virtud de nosotros los camareros que nos volvemos superdotados auditivamente para que no se nos escape una...
Las diez es la hora de cierre porque nosotros no damos cenas,recogemos todo,sonreimos a los que empiezan a trabajar de noche ,que vienen a por algo rápido ..un café para aguantar ,un bocata...y ya es cuestión de limpiar baños, barrer ,fregar, terraza salón y barra ...ese orden es importante siempre debe ser de fuera hacia adentro...
Y por fin me despido de mi pequeño paraíso por hoy,mañana se que volviendo a la rutina serás de nuevo también el paraíso,el oasis ,de quien venga a por su momento de relax..
Y le digo adiós a mi compañero ,con dos besos ,y bajamos la persiana y meto la llave en mi bolsillo.